María
sorprende a Rafael con dúas entradas para a última de Torrente.
Pero ó final, a muller indisponse e ten que ir só.
Acomódase
deixando libre a butaca do corredor, a que elixiría ela. A media
proxección, alguén ocupa o asento baleiro. Minutos despois, rózalle
unha perna. El interprétao como barra libre e, sen quitar a vista da
pantalla, investiga coa man: a compañía ten saia curta. A dona da faldra facilítalle a abordaxe afrouxando pernas e botóns. A película
cambia axiña de xénero e escenario; menos mal que é na última
fila.
O fin e a luz chegan demasiado pronto. Rafael permanece no
asento, concentrado en devolver a certo órgano a súa posición
discreta. María desaparece.
(Imaxe
procedente de internet)
María
sorprende a Rafael con dos entradas para la última de Torrente. Pero
al final, la mujer se indispone y tiene que ir solo.
Se
acomoda dejando libre la butaca del pasillo, la que hubiera elegido
ella. A media proyección, alguien ocupa el asiento vacío. Minutos
después, le roza una pierna. Él lo interpreta como barra libre y,
sin quitar la vista de la pantalla, investiga con la mano: la
compañía tiene falda corta. Su dueña le facilita el abordaje
aflojando piernas y botones. La película cambia enseguida de género
y escenario; menos mal que es en la última fila.
El
fin y la luz llegan demasiado pronto. Rafael permanece en el asiento,
concentrado en devolver a cierto órgano su posición discreta. María
desaparece.